Hablemos de quién es la persona más rica del mundo, ese que tiene millones y millones de dólares y sigue haciendo millones porque su fortuna no le basta, y sí, hablaremos de Elon Musk empresario, inversor y magnate sudafricano.
Su madre es canadiense y su padre sudafricano blanco, fue a diferentes universidades, en donde se graduó de Economía y Física.
Tras obtener sus licenciaturas, e inspirado por innovadores como Nikola Tesla decidió entrar en tres áreas en las que consideraba había problemas importantes, como luego indicaría él mismo: Una de ellas era internet, la otra la energía renovable y la última era el espacio.
Luego comenzó su carrera empresarial cofundando la empresa de software web Zip2 con su hermano, la cual proporcionaba soluciones de guía en línea para los periódicos, en 1999 Compaq adquirió la empresa por 307 millones de dólares, en ese momento, Musk tenía 28 años y se quedó con una parte de casi 24 millones de dólares.
En ese mismo año cofundó un banco en línea llamado X.com que se fusionó con Confinity para el año 2000, es cuando logran formar Paypal para que en el 2002 decidan vendérsela a Ebay por 1,500 millones de dólares. A partir de ahí, Elon Musk comenzaría a fundar algunas de las empresas por las que es más conocido hoy en día como lo son Space X, Tesla, SolarCity, OpenAI, Neuralink, The Boring Company y su última adquisición fue Twitter aunque ya le cambió el nombre a X, entre muchas otras. Actualmente Elon Musk tiene una fortuna de 192,7 miles de millones de dólares.
El estilo de liderazgo de Elon Musk es principalmente transformativo. Este se fija en los objetivos ambiciosos para él y sus empresas que requieren mucho esfuerzo y recursos, aunque también escucha las ideas de los miembros de su equipo y les permite opinar en las decisiones. A Elon Musk le apasiona lo que hace y tiene un estándar exigente de calidad, que espera de todos aquellos que trabajan con él.
Sin embargo, el enfoque de liderazgo de Musk implica utilizar una combinación de autocrático y democrático para lograr sus objetivos. Su estilo autocrático se utiliza a menudo para tomar decisiones rápidas y su estilo democrático promueve el diálogo abierto al tiempo que permite compartir diferentes ideas.
Elon Musk es poco convencional pero muy eficaz y combina ambición y determinación con la voluntad de escuchar a los demás y estar abierto a diferentes enfoques. Es esta la combinación única de estilos de liderazgo la que ha permitido a Musk alcanzar el éxito que tiene hoy.
Nuestro querido Elon Musk siempre ha tenido una posición ambivalente por así decirlo ante la inteligencia artificial. Tras ayudar a fundar OpenAI para luego salir del proyecto advirtiendo del peligro de que la IA se convirtiera en un peligro para la humanidad. Y para tratar de salvarla “otra vez” creó hace unos meses xAI, su propia empresa para el desarrollo de una IA beneficiosa y, por el momento, sarcástica.
Su implicación en este segmento lo ha llevado ahora a hacer unas declaraciones llamativas sobre el futuro de esta tecnología: según Elon Musk, la capacidad de los modelos de inteligencia artificial superará la inteligencia humana a finales de 2025. Según él, la cantidad de hardware que se dedica a IA se multiplica por 10 cada año y quizás menos, cada seis o nueve meses
De hecho, Musk fue más allá y predijo que en los próximos cinco años, las capacidades de la IA superarán a las de toda la humanidad. El magnate predijo el año pasado que lograríamos desarrollar una inteligencia artificial general (AGI) en 2029, pero tanto esa como las anteriores predicciones son solo eso: predicciones.
Musk ya se ha equivocado otras veces, lleva años prometiendo que los Tesla podrían lograr la conducción autónoma total, y también lleva tiempo prometiendo la llegada del hombre a Marte. Aunque ha avanzado en ambos objetivos, lograrlos parece estar aún lejos de su alcance.